Como ya os comente hace mucho calor en mi cocina por ello las recetas intento que sean FRESCAS, y esta es ideal para un día de verano, es una adaptación de la receta de de Marian Keyes "Salvada por los pasteles". Esta deliciosa, el picante de las galletas de jengibre va estupendamente con la acidez de la lima.
Ingredientes:
- 150 gr de galletas de jengibre (yo no tenia y como no encontraba lo que hice fue triturar los 150 gr de galletas con una cucharadita de jengibre en polvo).
- 75 gr de mantequilla.
- 6 hojas de gelatina neutra.
- 7 limas.
- 170 ml de leche evaporada (un bote pequeño, puedes añadir hasta 200 ml).
- 200 gr de queso para untar (puede ser light).
- 150 gr de azúcar.
- 200 ml de agua.
- Purpurina comestible verde (opcional, yo no tenia intente hacer un experimento pero no resulto, queda mas bonita con la purpurina).
Trituramos las galletas con el jengibre en polvo si no tenemos otra opción, con un robot, con la batidora, con un mazo, con lo que tengamos o nos apañemos. Derretimos la mantequilla y la mezclamos con las galletas, creando una pasta que pondremos en la base de un molde desmontable, puedes usar uno de 20 cm quedara más alta y gruesa o si la quieres más plana y esparcida uno de 30 cm, según la ocasión.
Ponemos tres hojas de gelatina en un plato hondo con agua unos 5 minutos, mientras en un recipiente con 100 ml de agua y otros 100 gr de azúcar lo hervimos disolvemos el azúcar, retiramos del fuego y añadimos la gelatina, removemos para que se integre todo y lo dejamos enfriar.
Batimos la leche evaporada hasta que quede ligera y espumosa, añadimos el queso y removemos bien, para obtener una mezcla cremosa. Agregamos el zumo de tres limas y la gelatina fría. Lo vertemos en el molde con cuidado y a la nevera por lo menos 3 horas.
Cuando lo vayamos a sacar preparamos la gelatina de arriba. En un plato hondo ponemos agua y las tres hojas de gelatina unos 5 minutos, exprimimos 4 limas y lo colamos, ponemos en un cazo 100 ml de agua, 50 gr de azúcar y cocemos un poco, agregamos la hojas de gelatina, el zumo de las limas y colorante verde brillante (vamos lo que viene siendo el verde lima) lo mezclamos bien y dejamos enfriar, cuando esto ocurra es hora de añadir la cucharada de purpurina. Sacamos el pastel del frigorífico y añadimos con mucho cuidado la gelatina, vuelta a la nevera esta vez como mínimo una hora.
Hay que desmoldarlo con cuidado, pasando un cuchillo entre el pastel y el molde para despegarlo, yo además puse un papel decorativo en el fondo del molde y así pude despegar la galleta de la base del molde.